La cerveza, gran enemigo de los entrenamientos en verano. (Pixabay).
Si es que es normal... verano, playa, el chirinquito llamándote con sus maravillosas jarras de cerveza fresquita. Yo entiendo que es muy difícil -casi imposible- decir que no, pero, a veces, hay que hacerlo. No merece la pena tirar por la borda meses de entrenamiento por beber un poco más de la cuenta en el periodo estival. Y si has apretado en tu entreno en los meses previos para llegar en plena forma al verano, con más razón. Así que no se trata de no tomar ni una caña, sino de hacerlo con cierta prudencia.

Deja una Respuesta