Alrededor de un 30% de los hombres sufren eyaculación precoz de forma habitual, y un porcentaje mayor tiene problemas de eyaculación prematura en algún momento de sus vidas. Generalmente esta disfunción está relacionada más con la mente que con un problema fisiológico. Por esta razón, existen algunos trucos para retrasar la eyaculación.
1. Haz ejercicio
Según un estudio reciente, una hora diaria de yoga –que relaja pero también ejercita los músculos pélvicos- durante 12 semanas permitía que la duración del sexo aumentara hasta cuatro veces. En general, el cardio puede mejorar tu rendimiento porque te permitirá mantener relaciones sexuales con mayor solvencia.
2. Reduce tus niveles de ansiedad
La ansiedad está relacionada con problemas de eyaculación y erección de todo tipo. Es decir, puede causar tanto eyaculación precoz como lo contrario. En general, intentar encontrar el motivo de esta ansiedad o estrés y poner soluciones es el mejor tratamiento, aunque también es recomendable acudir al psicólogo si no encuentras solución.
3. Emplea técnicas
Muchos hombres hacen uso de varias técnicas para retrasar la eyaculación. Aunque suelen funcionar, pueden no ser una solución a largo plazo. Estas técnicas incluyen el cambiar de posición habitualmente, hacer paradas de unos 30 segundos cada vez que estés a punto de eyacular, o pensar en otras cosas. Pero no es lo mismo aguantar, que disfrutar.
4. Habla con tu pareja
Ante cualquier problema de índole sexual, la comunicación es importante. Más si hablamos de una pareja estable, claro. Hay que intentar encontrar un punto medio entre lo que te gusta y lo que le gusta, lo que quieres y lo que quiere. Quizá alargar los preliminares sea una buena solución para vosotros, o te des cuenta de que a ella le guste el sexo contigo sin esperar sesiones de 25 minutos al más puro estilo pornhub.
5. Consulta con tu doctor
Sea un problema fisiológico o motivado por cualquier situación personal como el estrés, la mejor recomendación es que acudas a tú médico. El profesional de la salud puede ofrecerte una solución adaptada a tus dificultades. Por ejemplo, es importante llevar una adecuada y equilibrada alimentación, en el mercado se pueden encontrar distintos tipos de preservativos que podrías utilizar para beneficiarte -atrévete a experimentar- y, como último recurso, existen fármacos que te podrían ayudar.
Como hemos visto, querer retardar la eyaculación es muy habitual para estar más contentos con nuestro rendimiento sexual. Es importante no comerse la cabeza y disfrutar del sexo todo lo que puedas.
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