Cada uno tenemos nuestro estilo en la cama, pero lo cierto es que algunas personas más capacitadas físicamente pueden intentar posturas casi de ficción para otros. A continuación te presentamos 5 posturas que son solo posibles para personas muy en forma. La mayoría precisan de que los dos integrantes de la pareja estén capacitados, pero con un poco de entrenamiento específico podrás hacer casi cualquiera.
1. El semental orgulloso
Cuando ella se pone encima a cabalgar, el chico muchas veces deja de hacer nada. Se vuelve una estrella de mar. Pero lo cierto es que los hombres muy fuertes podrán aportar su granito de arena al disfrute. Primero, haz movimientos pélvicos al ritmo de su movimiento. Segundo, elévala con tus manos y levanta la zona pélvica, haciendo una especie de puente. Para este tipo de ejercicio necesitarás buen entrenamiento lumbar y de glúteos, así como un potente core.
2. Alzamiento
La postura más clásica de las películas porno, que has intentado mil veces con nulo éxito. El hombre se situa de pie, coge entre sus brazos a la mujer, que le rodea con las piernas. Desde esa posición y elevándola repetidas veces. Este es un ejercicio magnífico para ambos (la mujer se mantiene en el aire y entrena los abdominales, mientras que el hombre ejercita casi todos los grupos musculares) pero probablemente tendréis que empezar con embestidas asistidas. Una pierna arriba, contra la pared...
3. Bajo el agua
Cualquier posición que practiques bajo el agua exige cierta capacidad física. Aunque es cierto que el agua facilita levantar el cuerpo de la otra persona y mantenernos a flote, cada movimiento que hagamos se encontrará con mayor resistencia. Por ello, una jornada intensa de sexo en la playa o en la piscina solo está al alcance de personas bastante en forma, sobre todo si no tenemos nada a qué agarrarnos.
4. El cangrejo
Esta postura exige especialmente elasticidad, por lo cual el Yoga o el Pilates te pueden llegar a ayudar. Os sentáis frente a frente y unis vuestros glúteos. Cruzáis las piernas sobre los hombros del otro y os lanzáis a saco. Es una postura muy complicada pero si estáis bien entrenados conseguiréis darle continuidad.
5. Perrito modificado
Cualquier modificación sobre la postura del perrito suele exigir bastante fuerza por parte del hombre. Tanto si te la acercas a tu cuerpo y os mantenéis juntos como si decidís llevar la posición a posturas más difíciles y otros terrenos, necesitaréis un buen entrenamiento de glúteos y dorsales. No en vano, es una de las posturas que más calorías queman.