¿Corre riesgo mi salud si me convierto en vegano?

¿Es arriesgado adoptar una dieta vegana?

Es una de las dudas más habituales de aquellos que se plantean en convertirse en veganos, o de cualquiera que discute sobre el veganismo. Es peligrosa una dieta que solo se basa en verduras, granos, frutos secos y frutas -es decir, comida que solo proviene de plantas-? Ya sea vegana o no, una dieta con mucha fruta y verduras ya es un buen primer paso para una vida saludable. No obstante, mal adaptada o poco controlada, una dieta vegana sí puede suponer algunos riesgos para nuestra salud.

Beneficios de una dieta vegana

Como dice Jamie Oliver, alguien que solo coma patatas fritas estará siguiendo tecnicamente una dieta vegana, pero no una realmente sana. Una dieta vegana es, estadísticamente, más baja en grasas y con mayor presencia de vitaminas importantes (como la vitamina C), algo que por supuesto es beneficioso. Los veganos son, por lo general, más delgados, y tienen niveles de colesterol más bajos.

En principio, por la baja ingesta de grasas saturadas, una dieta vegana debería reducir el riesgo de enfermedades como la hipertensión o la diabetes. La mayor cantidad de fibra si consumimos cereales integrales también es positiva y se asocia a una menor afección de la próstata y colon, pudiendo incluso reducir la probabilidad de cancer de estas partes del cuerpo. Ser vegano puede suponer también algunos riesgos, aunque la mayoría son evitables si controlas bien tu dieta y encuentras sustitutos útiles para aquellos alimentos que no se consumen en una dieta vegana.

Riesgos de una dieta vegana

Tu salud no corre riesgo por convertirte en vegano, pero debes tener muy en cuenta lo siguiente:

-El cuerpo del ser humano es por naturaleza omnivoro. La vitamina B12 que es clave para nuestros glóbulos rojos se encuentra solo en productos de origen animal.

-La vitamina C, antioxidante clave para nuestro cuerpo, se encuentra en alimentos como cítricos, tomates, brócoli o col...Una dieta vegana puede suponer un déficit de esta vitamina, pero es fácilmente regulable consumiendo muchas de estas verduras y frutas.

-Es difícil consumir suficiente hierro con una dieta vegana (está muy presente en alimentos carnívoros). Por ello, una buena dieta vegana incluye muchas legumbres y frutos secos.

-Calcio. Al renunciar a los lácteos, perdemos gran parte de este nutriente. Es clave consumir productos ricos en calcio como cereales o tofu, en los supermercados hay incluso productos enriquecidos para veganos. Zumos, leche de soja...todos estos productos incluyen calcio.

-Omega 3. Están en los huevos y el pescado. La mejor fuente son las nueces, semillas y aceite de linaza y el aceite de colza. Las algas, un ingrediente cada vez más en alza, también suponen un aporte de Omega 3.

Además, existen muchos suplementos alimenticios a la venta, que incluyen estos nutrientes. Si te haces vegano, ten en cuenta que tendrás que controlar mucho más qué consumes, ya que es una dieta que exige que vigiles aquellos nutrientes y vitaminas que pueden ser deficitarias. Pero, en resumen, no hay ningún tipo de riesgo para tu salud si te informas bien y dedicas tiempo a controlar tu alimentación.

Roberto Gil: