Por muy saludable que uno coma, que es algo altamente recomendable, hay caprichos gastronómicos que no pueden dejarse de lado. Lo importante es no abusar de ellos, pero son parte de la felicidad. ¿O es que a ti no te cuesta dejar la nutella de lado? Seguro que no puedes resistirte. Lo que sí puedes hacer en cambio es controlar su consumo y sobre todo ahorrarte un buen puñado de calorías haciéndola casera. No te asustes porque es muy sencillo y sale exquisita, así que no te pierdas esta receta:
Los ingredientes que necesitarás conviene tenerlos preparados previamente. Son 200 gramos de avellanas tostadas, tres cucharadas de cacao desgrasado aunque es modificable la cantidad al gusto, y un buen chorro de leche, igualmente opcional el tipo aunque cuanto más desnatada menos calorías. Los que sean muy dulzones pueden incorporar miel o dátiles a la receta pero la más parecida a la crema de avellanas original no llevaría ninguno de los dos ingredientes.
La elaboración es lo más sencillo del mundo así que no te vas a tener excusa para no ponerte manos a la obra en casa. Bate las avellanas hasta hacer una crema con ellas y añade el cacao. Si quieres endulzarla, es tu momento así que incluye ahora el ingrediente escogido. Intégralo de nuevo en la batidora y, por último, añade la leche y mezcla hasta conseguir la textura y la intensidad del sabor que más te gusten.
Una variante de esta receta si tienes un poco más de tiempo es hornear avellanas en vez de comprarlas fritas. Todavía estarás recortando más calorías y por lo tanto será un resultado un puntito más saludable si cabe.
Hazte con un buen pan y a disfrutar de una receta dulce pero que al ser casera te ahorrarás el tan temido aceite de palma por lo que es infinitamente más saludable y con un sabor muy parecido a las opciones industriales que venden en los supermercados.