Internet nunca dejará de sorprendernos. Si hace un año consiguió que todo el mundo se echase un cubo de agua encima en la lucha contra el ELA, después nos convirtió en maniquís y ahora quiere que nos pongamos a bailar al ritmo de “My Boo” de Ghost Town Djs.
Cada vez son más las personas que se lanzan a bailar “espontáneamente” esta canción. Actores, cantantes, deportistas, celebridades y… ¡La Policía Municipal de Madrid! Sin embargo el cuerpo de seguridad madrileño ha querido dar una vuelta de tuerca a este reto y diferenciarse del resto.
En vez de bailar simplemente, le han dado un aire didáctico. En el vídeo se puede ver como varias parejas de policías frenan a un peatón que quiere cruzar con el semáforo peatonal en rojo, un ciclista que usa cascos para escuchar música, un motorista que va muy rápido o un ciudadano que tira la basura en el parque.
Los protagonistas del vídeo son integrantes del grupo de teatro de la Policía Municipal de Madrid cuya intención es que los ciudadanos aprendan normas cívicas de una forma más dinámica y desenfadada.
El Running Man Challenge se puso de moda en Estados Unidos de la mano de un equipo universitario de baloncesto. En los días previos a un encuentro, retaron a sus rivales a compartir un vídeo similar en las redes sociales. Después de millones de likes se volvió viral.
Pero no sería hasta que la policía de Nueva Zelanda retó a todos los cuerpos de seguridad del mundo a unirse a este divertido reto. Sin embargo, lo que puede parecer una forma divertida de enseñar modales ha recibido muchas críticas.
«Vamos a ser el hazmerreír» del Cuerpo, «nos están lloviendo las quejas», aseguraba ayer Julián Leal del sindicato mayoritario CPPM. Este sindicato pone en relevancia además que el artículo 241 del reglamento considera falta grave «los actos y conductas que atenten contra el decoro o la dignidad de los funcionarios». Desde el CSIF, otro de los sindicatos más importantes, aseguraban que «enturbia e invita al denuesto de la Policía Municipal».