La ansiedad es esa enfermedad silenciosa que cuando aparece por primera vez es muy difícil de detectar. Aparentemente no tiene razón de ser ya que es el desarrollo de un miedo irracional a situaciones cotidianas que no tienen en principio nada amenazante. Es cierto que cuando se sufre una vez ya sí que es muy sencillo de saber cuándo vuelve, pero para aquellos que no saben si la sufren o han sufrido en alguna ocasión, aquí tienen algunos de los síntomas que indican que efectivamente se trata de ansiedad:
1. Preocupación desmedida
Si sientes pensamientos que te ahogan, que te aprietan en el pecho y no te dejan respirar, habitualmente, es muy probable que estés ante un problema ansioso importante. Tienes que reflexionar sobre si estás sufriendo por esas preocupaciones y si te ocurren a menudo.
2. Falta de descanso
Suele ir de la mano con el primer síntoma. La ansiedad ataca directamente al sueño. La angustia no te deja dormir y sobre todo no te deja descansar ni los pocos ratos que consigues conciliar el sueño.
3. Problemas musculares
La ansiedad tiende a generar bloqueo muscular así que es posible que sufras esa sensación en las articulaciones especialmente y también en otras zonas de tu cuerpo como la mandíbula.
4. Sensación de miedo
Pero no miedo justificado, sino fobia y miedo ante situaciones cotidianas que a priori no conllevan ningún peligro y que incluso conoces bien. Suele provocar una especie de parálisis, de bloqueo. Una especie de miedo escénico.
5. Problemas estomacales
Que no te siente bien la comida es otro síntoma de la ansiedad. Puede que te dé por comer mucho o por el contrario por no comer, pero en cualquier caso son trastornos derivados de un estado ansioso muy probablemente. Además, cuando comes, debido a cómo lo haces, tu estómago no lo tolera bien.
6. Inseguridad
Es un síntoma muy relacionado con el miedo y es normal que ocurra porque al final la ansiedad hace que dudes de ti mismo, por lo que es común que afecte a tus relaciones sociales. Es un problema de gravedad cuando tiene efectos secundarios como las náuseas. Esta inseguridad es posible que te esté llevando también a cuestionarte todo lo que haces, a creer que lo haces todo mal incluso.
7. Malos recuerdos
Cuando uno sufre de ansiedad es probable que también le vengan a la mente recuerdos muy negativos, tanto cuando está dormido, en sueños, como en los momentos en los que es plenamente consciente. Suelen ser momentos en los que se sufrió ansiedad y angustia, no tienen por qué ser muy traumáticos.
8. Ataques de pánico
Es el síntoma que demuestra que la ansiedad está ya muy arraigada en ti por lo que debes dejarte ayudar por especialistas. El pánico provoca un sentimiento brusco y repentino de terror que se refleja en lo físico con sudores, dolor en el pecho, aceleración del pulso, etc.
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